Un día misterioso

Érase una vez dos espías. Vivían en la calle de Pío 12. Después de dos días largos y muy duros, les llamaron para resolver un misterio en el muelle. Manuel fue a muelle.
Manuel fue en caballo al muelle, pero Ángel no. Entonces sonó el móvil de Ángel:
- Ángel ven enseguida- dijo Manuel.
- Pero Ángel respondió:- Espérate unas horas que me estoy duchando. Y dijo:- Ven enseguida o te mato.-Voy volando.
Entonces Ángel llego al muelle con su Ferrari nuevo.

Cuándo se bajo vieron una colilla tirada en el suelo, y un edificio ardiendo. Y fueron a buscar al cabello muerto el causante de todo. Le vieron que iba corriendo por el callejón de enfrente. Se montaron en él Ferrari nuevo de Ángel. Y le siguieron, el cabello muerto robo un coche y se fue en dirección Japón. Después de once largas horas de viaje, llegaron a Japón detrás del cabello muerto.

Y cuando recorrieron todo Japón el cabello muerto se rindió. Le cogieron y le metieron en el maletero.

Y sonó el móvil de Manuel:- Buen trabajo chicos volver a España meterle en la cárcel y venir a mi despacho para daros otro trabajo por lo bien que lo habéis hecho. Y después de otras once horas, llegaron a España y lo metieron en la cárcel.




Fin